A continuación, os detallamos los 5 siniestros más frecuentes en comunidad de propietarios, y ya os adelantamos que en más de uno la protagonista es el agua:
Daños provocados por el agua:
Son muchas las comunidades, por no decir todas, que tienen que enfrentarse a los siniestros provocados por el agua.
Las causas son muy diversas, desde la rotura de tuberías o bajantes, hasta humedades, filtraciones o goteras.
El primer paso que debemos dar en estos siniestros es determinar si el origen está en instalaciones comunitarias o en instalaciones privativas. La comunidad de propietarios se hará cargo de problemas en tuberías comunitarias o bajantes. A no ser que el seguro de la comunidad tenga la cobertura de Responsabilidad Civil y daños propios por aguas privadas, no se hará cargo de roturas en tuberías privativas.
Daños provocados por fenómenos atmosféricos:
La mayoría de estos siniestros también tienen al agua como protagonista, pues suelen ser las fuertes lluvias y el granizo los fenómenos que más destrozos ocasionan en las comunidades de propietarios. Normalmente, un seguro de comunidades se hace cargo de todos los daños ocasionados por estos eventos. Si bien es normal que la compañía realice comprobaciones preliminares con el Instituto Nacional de Meteorología para comprobar que el temporal ha ocasionado los daños.
Roturas:
El paso del tiempo y los accidentes ocasionan siniestros en las zonas comunes de los edificios y urbanizaciones.
Algunas roturas frecuentes suelen ser elementos de vidrio en puertas de paso, espejos, paredes o techos, por ejemplo.
También puede haber roturas en la estructura del edificio en sí, por ejemplo, en el revestimiento o la solería de piedra, mármol o granito del interior del edificio. Si la comunidad cuenta con placas solares, la rotura de los cristales que las forman podría también considerarse en la cláusula de la comunidad de propietarios.
Actos de vandalismo:
Uno de los problemas a los que se enfrentan muchas comunidades son los actos vandálicos. Los causantes personas ajenas a la comunidad y provocan daños en fachadas, puertas, ventanas y otros elementos comunes del edificio. Es importante tener en cuenta que algunos seguros de comunidades no cubren, por ejemplo, la limpieza de grafitis en las fachadas, carteles pegados o similares. También podemos encontrarnos con la rotura de los intercomunicadores, o del mobiliario de las zonas comunes de una urbanización. Es importante hablar todo esto con la aseguradora de cara a obtener un seguro que cubra realmente todas las necesidades. En el caso de vandalismo es muy recomendable tomar medidas disuasorias como la instalación de cámaras de vigilancia.
Daños por electricidad:
La inutilización del ascensor, los fallos en las puertas eléctricas de garajes o las consecuencias en el sistema de eléctrico debido a corrientes anormales, cortocircuitos o sobretensiones en la red. Estas son algunas de las averías que
pueden afectar a las comunidades de propietarios.
Un cortocircuito, por ejemplo, puede ocasionar un incendio o una descarga eléctrica, y una sobretensión puede ocasionar que aparatos electrónicos se vean dañados. A su vez, una sobrecarga dejaría sin corriente al edificio, provocando daños en otras instalaciones.
¿Cómo prevenir este tipo de sucesos?
Lo primero sería que técnicos especializados supervisen la instalación eléctrica del edificio, y si es necesario instalar nuevos mecanismos, que lo hagan profesionales con el conocimiento de nuestra comunidad. También es importante evitar las filtraciones de agua y las plagas de roedores, ya que suelen deteriorar el sistema de cableado.
Estos son los 5 tipos de siniestros más frecuentes en las comunidades de propietarios. Si eres presidente o gestor de una comunidad, en DR Seguros te informaremos sin compromiso sobre qué coberturas son las más adecuadas para tú comunidad. Ponte en contacto con nosotros aquí.